lunes, 8 de diciembre de 2008

Navidades cercanas

Una vez finalizado el Puente de la Constitución, para otros el de la Inmaculada o la Purísima, los adornos que permanecen guardados de un año para otro vuelven a aparecer, para decorar nuestras casas, hogares, negocios... Son los primeros momentos de ese Espíritu Navideño que empieza a invadirnos, a veces lentamente, sin darnos cuenta, otras entrando en nuestras vidas como si de un huracán se tratase. Para mí, personalmente, este año será diferente por los motivos que ya sabéis, acontecidos hace apenas dos meses. Hace años que la Navidad había dejado de tener significado para mí, en parte debido a ese consumismo extremo que obliga a regalar a los seres queridos, y también por la nostalgia de aquellos y aquellas que nos faltan, ya sea por la distancia o por el destino que nos los arrebata cuando más necesitamos de su presencia.
De todas formas, no puedo dejar de pensar que este año he contado y explicado tradiciones navideñas, a pesar de lo contrario que soy a las tradiciones, lo cual no quiere decir que no las respete, pues en eso se basa la tolerancia. Ese es el espíritu que debe reinar, y no el mandato de los grandes almacenes para que nos gastemos el máximo de dinero posible en regalos, comidas y otros menesteres superfluos.

2 comentarios:

  1. No suelo ser muy forofa de la navidad, pero si que tiendo a hacer casi todas las cosas... cenas, regalos, cafés...

    Besicos

    ResponderEliminar
  2. Yo también... A veces te arrastran en una vorágine consumista...
    Besicos

    ResponderEliminar

Tu opinión es importante