sábado, 19 de julio de 2008

Who watches the Watchmen?

Sólo diré una cosa... Molaaaaaaaaaaaaaa

viernes, 18 de julio de 2008

Secuelas de una huelga inútil

Una de las cosas que más me ha apenado en los últimos tiempos ha sido la inutilidad de la huelga de transporte. De nada han servido las movilizaciones de aquellas personas que exigían unas mejoras con respecto a su trabajo. Poco ha servido que aquel camionero muriese o el otro fuese incendiado por unos salvajes. Nada ha cambiado, ya que el gasóleo sigue subiendo, los transportistas cobrando lo mismo y los precios por las nubes.Una de las secuelas de esta huelga ignorada por el Gobierno, como la inexistente crisis económica, es la subida de precios del transporte por carretera. El otro día vi en la taquilla de los autobuses a Madrid que el servicio se había encarecido en un euro en el trayecto de ida. Puede que no sea mucho, pero esta subida supone una pérdida para los derechos de trabajadores y trabajadoras, independientemente de que traten de vendernos que los viajeros y viajeras han disminuido, una excusa barata, ya que cualquier empresa haría precios más atractivos si ve que las ventas bajan. No entiendo esta pérdida de derechos de quiénes trabajan y de la ciudadanía en general, y menos en un país gobernado por gente que dice ser de izquierdas, aunque sus acciones demuestren lo contrario.

Club de lectura


Hoy he compartido la primera parte del segundo encuentro del Club de Lectura de la Fnac, donde hemos hablado del libro Si esto es un hombre, de Primo Levi, una obra bastante dura, nada fácil de leer por su crudeza y su realismo, pero esencial si queremos luchar contra la intolerancia y el olvido de los campos de concentración. La verdad, no escribo hoy para hacer crítica literaria, sino para hablar del club de lectura como tal, pues no es más que un sitio donde debatir y compartir opiniones, todas ellas respetables, se esté de acuerdo o no. Bajo el pretexto de hablar de una obra comprometida, hemos ido aportando soluciones para tratar de hacer un mundo más justo, dando nuestros puntos de vista sobre los más dispares asuntos, y sobre todo aprendiendo unos de otros, que es lo más importante, desde mi punto de vista. Quiero definir este encuentro como enriquecedor en todos los sentidos, puesto que me ha servido para ver con otra perspectiva la literatura. Algo tan íntimo y personal como es el hecho de sumergirte en las páginas de un libro, deja de serlo en el momento en que otras personas dan su visión y versión de lectura, para así poder aumentar el conocimiento que se tenga, ya que esto nos va quitando prejuicios y tabúes ya existentes.

miércoles, 16 de julio de 2008

Mendigos que coaccionan

Existe una realidad palpable y tangible, como la vida y la muerte, que es la de los estratos sociales, y las diferencias socioeconómicas. En este mundo de de riqueza mal repartida y consumismo extremo, no son pocas las personas que tienen como única fuente de ingresos a la mendicidad. Son tantas las historias que llevan a la mendicidad, como personas que la ejercen, y se merecen el mayor de los respetos, siempre y cuando no especulen con dicha forma de vida.
Mientras daba un paseo, se me acercó un indigente, exigiéndome que le diese una limosna, a lo que me negué, pues sé que esta persona saca en un día más de lo que yo soy capaz de ganar al mes, pues la zona donde se sitúa es uno de los mejores sitios para hacer negocio. Al escuchar mi respuesta, comenzó a recriminarme mi actitud, como si se tratase de una obligación el mantener su altísima economía, pese a que su sucio y deplorado aspecto pueda indicar lo contrario. He de decir que me parece de una extrema crueldad usar la pena y la mentira para lograr beneficios económicos y lucrarse de forma escandalosa. Es por eso por lo que prefiero dar algo de calderilla a un músico que a quién ejerce la mendicidad como un rentable negocio y manipula para que ese negocio no quiebre.

martes, 15 de julio de 2008

Famosos

Dijo Andy Warhol que todo el mundo quiere o necesita sus 15 minutos de gloria. Hace unos días, un programa de televisión ofrecía la oportunidad de lanzar a la fama a aquella persona que lo desease. Ni corto ni perezoso, llamé para poderme promocionar como bloguero, escritor y ciberescritor, y de camino continuar promocionando este rinconcito, como sabéis que me gusta llamar al blog. Cuál sería mi sorpresa cuando me dicen que esa no es una forma de ser famoso, que quieren otras cosas. Es decir, fomentar el famoso parasitario, que vive a costa de vender sus miserias y sus relaciones con personajes conocidos por su trabajo. A este programa no le interesa que la fama llegue por el esfuerzo. Más bien al contrario, desprestigian a quiénes desean ver reconocido el trabajo de años, con todo el esfuerzo que ello supone. Para quiénes realizan esta serie de programas, el sacrificio no les supone nada, pues sólo piensan en las audiencias, y en dar la imagen de que la fama es algo fácil. Pocas veces, o ninguna, recuerdan aquella frase de la profesora de Fama que decía que costaba, y que en la escuela iban a empezar a pagar, a la vez que pegaba con el bastón en el suelo. Cada vez estoy más cansado de esos satélites que pululan, robándoles el reconocimiento del público a quiénes se lo merecen, y de la gente que apoya y promueve a tales inútiles, que no saben hacer otra cosa.

lunes, 14 de julio de 2008

Comer carne es cruel

El otro día recogí un folleto de unos activistas ecologistas contrarios al consumo de carne. En este panfleto, nos contaban cómo se realizan las matanzas, de una forma extremadamente manipulada para que la persona que mira dicha publicidad sienta asco, sea vegetariana o no. puedo entender que descarten las carnes de sus dietas, que traten de concienciar a la gente de sus ideas, pues la tolerancia y el respeto es algo por lo que abogo y lucho a capa y espada, bien lo sabéis, pero me parece de una frivolidad tan alta acusar a quiénes optan por incluir la carne en su dieta de crueles,mientras se especula con los alimentos y artículos de primera necesidad. Desde mi humilde, que no modesto, punto de vista, estas campañas se deberían centrar en evitar que unos pocos impidan que se acabe con el hambre y la miseria del mundo, y no en si hay crueldad en la ingesta de un chuletón, una hamburguesa o una tapa de chorizo o jamón. Pienso que la verdadera crueldad es que existan criaturas que no tienen un bocado que llevarse a la boca, mientras se despilfarra de forma incontrolada, o que los políticos de la Unión Europea no vean la tragedia que obliga a una inmigración ilegal, como decíamos ayer. Comer no es crueldad. Evitar que la gente se alimente sí lo es. Hagamos algo por cambiar esto.

domingo, 13 de julio de 2008

Europa

La clase política actual se ha olvidado de la filosofía que unió a tantos países hace más de 50 años, con una Europa sin fronteras, para poder circular libremente y comerciar de manera igual. Ahora estos líderes actuales han decidido que puede existir delito en la inmigración que procede allende nuestras fronteras, con una directiva que permite encarcelar hasta 18 meses a los inmigrantes y expulsaros durante un plazo de hasta 5 años. Se olvidan de la miseria que sufren esas criaturas que se ven obligadas a abandonar sus países de origen, dejando atrás a familias completas. A esta clase política actual le falta empatía y capacidad de comprensión. Son incapaces de ponerse en la piel de aquellos y aquellas que cruzan el charco con falsas promesas del sueño europeo. El poder les ha cegado tanto que viven en una realidad alternativa, lejos de los problemas reales de la población. El sueño europeo se desvanece con una celeridad increíble, viendo cómo se están perdiendo los privilegios más esenciales. Entre las recomendaciones laborables y estas directivas de la vergüenza, la ciudadanía vuelve a ser gobernada por políticos y políticas autoritarios, que sólo escuchan la voz del pueblo en las elecciones, e ignoran su problemática día a día, hundiéndolos más aún en la miseria si les es posible.