viernes, 16 de octubre de 2009

Torrente

No voy a hablar de la película, ni del asqueroso personaje creado por Santiago Segura, reflejo de tanto macho ibérico y tanto ser despreciable. Hoy quiero recordar a un pequeño ser, un perrillo de ocho años que murió atropellado por un coche. Torrente era un York Shire con una presencia que muchos perros quisieran, pero también era un manojo de nervios, simpático y leal, que no dudaba en salir corriendo hacia tí si le hacías cualquier carantoña, para derrapar delante de tus narices, exigiéndote que le rascases la panza. Torrente era un amigo, era mi amigo. Y un coche se lo llevó por delante. Su dueño me dijo que no sufrió, que murió en el acto. Yo no lo supe hasta ayer, pero lo imaginé cuando no lo vi en la esquina como siempre que me reclamaba un poco de atención, un poco de cariño en sus últimos meses de vida, que se acurrucaba en mi regazo para que lo mimase. Él era así. Hoy veo vacío su territorio, sin su diminuta pero inmensa presencia, y me duele echarle de menos, porque era un perro único, un sinvergüenza que me hizo amar la raza York Shire y su fuerte personalidad. Hoy quiero rendirle este póstumo homenaje a ese pequeño can que tanto me alegraba el día si estaba decaído, por su simpatía y entrega incondicional. No te olvidaré, Torrente.

2 comentarios:

  1. a mí me paso lo mismo solo que mi perra se llamaba laika despues como suelen decir eso de que un clavo saca otro clavo fuimos a la protectora y trajimos a lurra la perra mas diradatxera de todo el planeta, pero laika sigue ahí formando parte de lo que ha habido de bueno en mi vida.

    ResponderEliminar
  2. Como Torrente seguirá en mi vida, loreazaharra.
    Un abrazo.
    Me alegro de verte.

    ResponderEliminar

Tu opinión es importante