Warlords

Áridas extensiones de tierra virgen dominaban lo que un día tuvo el nombre de Nueva York. Atrás quedaron las grandes guerras y las más modernas tecnologías, puesto que apenas habían pasado doscientos años desde el último gran cataclismo que asoló la que fue llamada Ciudad de los Rascacielos. Ocultos en tiendas de campañas fabricadas a base de trozos de metal reciclado y madera, la humanidad sobrevivía agrupados en tribus nómadas, que se disputaban el control por el hueco que ocupaba la isla de Manhattan. Me llamo Jonás, y pertenezco a los Señores de la Guerra, los Warlords, unos especialistas en asedio y guerra de guerrillas. Hace días que nuestro asentamiento está siendo atacado por los Prétores del Desierto, los cuales sólo desean acabar con el resto de los supervivientes, con las técnicas más crueles de tortura y asesinato. Ellos no se rigen por el reglamento del Honor de la Guerra, que dicta unas estrictas reglas en cada combate. Ellos no saben respetar las treguas ni las estrategias, las cuales entienden como destrozar y asesinar a sangre fría, lejos del combate. Por eso estamos alerta, sin perderlos de vista. Queremos que esto termine de una vez, pero sin renunciar a nuestro territorio. El jefe de la tribu estudia la situación, y me ordena que sirva de cebo para distraerlos. Hace días que están mermados, aunque su crueldad les hace resistir. Nosotros les superamos en número. Espero que esta noche termine todo. No tengo ganas de ver morir a más amigos...