Autobús ateo

La polémica lleva un tiempo circulando a través de Internet, y en la calle. Se trata de una campaña publicitaria que presenta el ateísmo como otra más de las herejías-entiéndase el concepto de herejía como opción, su significado original- existentes, y sobre la que nadie osa pronunciarse, pues si nadie duda de la creencia en Dios o los dogmas de fe, milagros o mil historias que las diferentes religiones nos muestran, declararse ateo es algo incomprensible. ¿Por qué? El ser humano está acostumbrado a creer en un ente superior o varios, como creencias ancestrales que han evolucionado o degenerado, según se mire, hasta las diferentes fes actuales. Plantear la no existencia de una divinidad es una interesante herejía, a la vez que polémica. No se rechaza ningún tipo de planteamiento. Sencillamente se pone sobre la mesa una opción diferente, tan válida como las que recogen a un dios o más, para así poder plantar el debate, tan necesario en esta sociedad que castiga a los librepensadores por sus ideas. Al posicionarme como creyente, que no como hombre religioso, nuestras posturas están enfrentadas, sin embargo, entiendo que es respetable manifestar su agnosticismo o ateísmo, cosas totalmente diferentes, y debemos luchar porque todo el mundo pueda sentirse libre de creer, no creer, o sencillamente no planteárselo.