lunes, 1 de junio de 2009
Bailando en la Oscuridad
De todas las películas malas a las que me he enfrentado, tan sólo hay una que puedo decir que es mala, mala, mala a más no poder, aunque la crítica y la clase intelectual hablen de una obra maestra. Bailando en la Oscuridad es un timo, una cinta hecha para espantar al espectador, a la espectadora de la sala donde se proyectaba. Con una historia deprimente como pocas, a la protagonista(Bjork) no le van las cosas mal, sino peor. Rodada cámara al hombro, sin dejar tregua salvo en las canciones, que usaba el trípode, Lars von Trier rodó un truño que me hizo que jamás volviese a ver un trabajo suyo, por muy bueno que me dijesen que es. Para mí, esos premios obtenidos, esas menciones carecen son excesivas, pues considero que su director no pretendía otra cosa que reírse del público, y lo peor, que sería alabado y peloteado por un producto donde su calidad es demostrable. Para mí dice más una película de esas tachadas como cine comercial o convencional que tres horas de cámara al hombro, capaces de alentar al suicidio a quién vea Bailando en la Oscuridad en sus horas bajas. Así que mi recomendación es que si no la habéis visto, no la han visto, la pérdida no es tan grave. Para mí es extremadamente prescindible.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
me ha pasado como muchas pelis lo que a ti con esta, que no te gusta, es mas, la vez hasta mala...
ResponderEliminarbesicos
Pues no te pierdas "Karate a muerte en Torremolinos". Yo la ví fumado y me reí mucho, pero si no... eso si que es un TRUÑO.
ResponderEliminarYo veo la obra del señor Von Trier como un insulto, querida Belén.
ResponderEliminarBesicos.
Ya la ví, dezaragoza. Y era mi crítica del domingo...¬¬
¡Jajaja!
Un abrazo.